Freedy Krueger ha sucumbido a las hipotecas suprime. Acaban de deshauciarlo, y su casa sale a la venta
Imagen icónica del cine de terror americano para adolescentes en los años ochenta, benditos ochenta, son sin duda las cuchillas de Freddy, irrumpiendo en medio del baño de espuma de la dulce Nancy, y no precisamente con la intención de rascarle la espalda. Ésta es una de las muchas imágenes que nos proporcionó en su día la cinta del maestro Wes Craven, A Nightmare on Elm Street (Pesadilla en Elm Street, 1984), que por desgracia tuvo más secuelas de las necesarias, arruinando por completo la historia más allá de la tercera. El éxito de esta película se debe, entre otras cosas, a la perfecta armonía de todos los elementos que componen el conjunto, y uno de ellos es la casa en la que vive Nancy, y en la que acostumbraba a colarse un tipejo llamado Freddy, cuando a la chica le entraba el sueño. La vivienda en cuestión se ubica en el número 1428 de la calle Elm Street, aunque en realidad, esta dirección ficticia se corresponde con la Avenida North Grenesee 1428.8, Los Angeles, California. Una casa que ahora está en venta.
No sabemos si las hipotecas subprime habrán desahuciado a nuestro querido Freddy Krueger, pero el caso es que esta preciosa vivienda unifamiliar situada en West Hollywood, se ha puesto a la venta y podría ser tuya por la módica cifra de 2,1 millones de dólares (1,5 millones de euros). A vista de las fotografías, la casa conserva el encanto original, pero está claro que no da mucho miedo. Más bien todo lo contrario, sería todo un placer pasar una temporadita al año por esas latitudes, y vivir en un sitio como el propuesto. Se trata de una vivienda de 250 metros cuadrados construidos, con tres dormitorios y tres cuartos de baño. Y aunque fue reformada en el año 2006, la fachada conserva el aspecto que la hizo famosa en el año 1984, con motivo de la película. Un precioso edificio del año 1919, que además viene con piscina incluida, y una casa de invitados anexa.
Puede que Freedy Kruger aún continúe con sus ansias de venganza intactas, pero eso no debería ser motivo de preocupación para un aficionado al pulp como tú, o como yo, sino más bien todo un acicate para atracar el banco de la esquina, y recabar los fondos necesarios. Recuerda que la casa salió en la primera película, la segunda, y en la séptima. Ahora, la próxima entrega podrás protagonizarla tú.
Si la gente normal acostumbra a comprarse casas de ensueño... ¿por qué no ser originales y comprarse una de pesadilla?