Ni los OVNIS se libran de la crisis. Reino Unido anuncia que cerrará su oficina de investigación
Fox Mulder y Dana Scully, en la cola del paro. Éste podría ser el titular, pero no estamos hablando de una serie televisiva de ficción, sino de la pura realidad. Aunque no sé qué es más extraño, si el hecho de que el gobierno hable públicamente de este tipo de agencias, o la justificación de que a causa de lo costosas que resultan, se ven obligadas a cerrarlas. A veces pensamos que el único país que destina recursos a la investigación de lo paranormal, y la temprana detección de amenazas alienígenas, es únicamente Estados Unidos, y que a los demás países este tema se la trae al pairo. Pues ya vemos que no. Reino Unido también andaba metida en el ajo, y ahora la pregunta que me surge es, ¿y España? Supongo que algo habrá, pero me da a mí que su presupuesto debe ser ridículo, o quizás no. Quizás un simple lapicero esté presupuestado en miles de euros, y suma y sigue, que por algún lado hay que justificar los desmanes económicos de nuestra clase política; y echarle la culpa a los alienígenas puede resultar de lo más rentable. ¿Verdad?
Por lo que se ve, y a raíz de los documentos recientemente desclasificados por el Ministerio de Defensa Británico, la agencia de investigación dedicada al fenómeno OVNI, no era rentable. Esta agencia consumía grandes recursos, y no ofrecía ninguna utilidad de tipo militar. Es decir, que los funcionarios no eran capaces de encontrar la pistola de rayos desintegradores que le habían prometido a sus jefes, y tenerlos en la oficina, a croissants y videojuegos, pues como que no. El gobierno, ante semejante panorama, decidió cerrar las oficinas en el año 2009, habida cuenta de que le era más rentable el espionaje a gran escala de las comunicaciones, no solo de los humildes mortales, sino también de la casta política, sean quienes sean. Así, y según el reciente escándalo destapado por Edward Snowden, sabemos, entre otras cosas, como el gobierno británico habría ordenado espiar la cumbre realizada por el G20 en Londres, en ese mismo año, 2009. Todo ello según los documentos publicados en The Guardian.
Los documentos desclasificados incluyen un informe de un miembro de las fuerzas aéreas, Carl Mantell, quien expone detalladamente, a la atención del ministro de Defensa, Bob Ainsworth, la inoperancia de la oficina de investigación OVNI, recomendando su cierre. Dicho informe manifiesta que todos los avistamientos realizados no resultaron concluyentes, siendo imposible determinar algún tipo de amenaza alienígena, o algún tipo de beneficios (este tipo de investigaciones se remonta a la era de los Nazis y sus actividades ocultistas para ganar la guerra). Sin embargo, los seguimientos realizados has supuesto un aumento del gasto, repercutiendo directamente en el presupuesto destinado para otras actividades militares. Por lo que se recomienda su cierre.
Además, el fin de las operaciones de seguimiento e investigación no solo implicaría el cierre de la agencia, sino también del teléfono de atención al ciudadano (las malas lenguas dicen que ahora dicha línea está conectada con el manicomio estatal), así como la dirección de correo para atender las incidencias, o entregar pruebas. Dicho informe, un tocho de más de 4.000 folios, incluye la descripción de diferentes avistamientos investigados. La mayoría responden a OVNIS en forma de platillo volante en la zona de Stonehenge, pero también se han descrito casos de ciudadanos abducidos. Vamos lo normal, junto con alguna que otra extravagancia fruto de la imaginación, o…, puede que de la increíble realidad. ¡Quién sabe!
¡La verdad está ahí fuera! En fin, nosotros hemos decidido tomar el testigo, y a partir de ahora, cualquier incidencia, avistamiento, abducción, o prueba fehaciente de una amenaza alienígena, podéis reportárnosla, para que nos hagamos eco de la noticia. No es bueno que los alienígenas nos cojan con los pantalones bajados, porque “haberlos, haylos”.
Fuente: Reino Unido cierra su unidad de investigación de ovnis porque era costosa