Hazte con los planos, y sé el primero en fabricar un destructor estelar
No estamos hablando de ciencia ficción –a lo mejor un poco sí–; estamos hablando de un invento revolucionario que cambiará el mundo tal y como lo conocemos. Todavía está por ver si para mejor o para peor, aunque a vista de uno de los videos virales que no deja de dar vueltas por internet, mucho me temo lo peor. Las impresoras 3d evolucionan a pasos agigantados, y ya es posible imprimir muchos objetos sencillos. El problema está en que si ante un invento como éste, lo primero que se nos ocurre es fabricar un subfusil de combate: 3D Printed Gun Documentary, entonces una cosa está clara: la especie humana jamás decepciona. Siempre somos capaces de lo peor.
Supongo que a estas alturas todos vosotros habréis visto en las noticias a estas impresoras en acción, pero para el que no tenga ni idea de lo que estamos hablado, decir que se trata de unas impresoras que lo que hacen es esculpir o construir cualquier diseño en tres dimensiones usando un material sintético, que tras polimerizarse el diseño, da lugar a la pieza en cuestión. El tema técnico no es lo mío, pero la idea se capta enseguida, no en vano ya hemos visto muchas de estas máquinas en multitud de películas de ciencia ficción. Por ahora son muy rudimentarias, y tardan mucho tiempo en “fabricar” un objeto. Y por supuesto, de baratas tienen poco. Sin embargo, las posibilidades son infinitas.
La clave está en los materiales que se utilicen, la materia prima. Debe ser un material barato, resistente, y fácil de trabajar. De poco me sirve que quiera imprimir en mi casa una silla de cocina, si me va a salir diez veces más cara que una nueva. Supongo que algún día todos estos problemas no serán más que pequeñeces, y habrá impresoras del tamaño de una casa. La próxima vez que quieras cambiar de coche bastará con que imprimas un Ferrari, de la misma forma que imprimes hoy en día una foto sacada de internet. El límite lo pondrá tu imaginación, y ya sabemos que si es para lo malo, imaginación no nos falta.
De todas las aplicaciones posibles, probablemente una de las más interesantes sería la impresión orgánica. Es decir, poder crear órganos funcionales, lo cual está claro que sería ir mucho más allá de los simples objetos, ya estaríamos incluso hablando de crear vida. Por ahora, la empresa Invitech parece estar trabajando seriamente en el tema, y ya es capaz de construir tejidos y exoesqueletos a partir de un compuesto celular mezclado con hidrogeles.
La parte más compleja está en la creación de los diseños, para lo que sería necesario saber manejar los programas oportunos CAD (diseño asistido por ordenador). Es decir, yo diseño, yo fabrico. Sin embargo, la mayoría de las personas bien que se conformarán con hacerse con esos diseños, ya sea de forma legal, ya sea ilegal, punto éste que supondrá un quebradero de cabeza a las autoridades competentes.
Yo lo tengo claro, en cuanto pueda trataré de hacerme con los diseños originales de El Halcón Milenario, y me escapo del planeta, porque en cuanto se popularice este invento, miedo me da lo que le pueda ocurrir a la gente. Aunque mejor dicho, casi ya puestos me imprimo La Estrella de la Muerte, a ver quién me supera. Ahora bien, hagas lo que hagas, asegúrate de que lo planos son los buenos, no vaya ser que la nave te deje tirado en alguna galaxia lejana.
Video Impresoras 3D en Acción